EMPRENDIMIENTO
Una tienda en la colonia o vecindario ¿es emprendimiento o es autoempleo? ¿se puede ser ambos? ¿qué caracteriza a un emprendedor? ¿qué caracteriza a un emprendimiento? ¿qué lo hace exitoso: el ingreso, su expansión, sus redes sociales? ¿cuáles son los indicadores para determinar el éxito o el fracaso de un emprendimiento? El Centro de Opinión Pública realizó un estudio entre expertos en emprendimiento y entre emprendedores para conocer su opinión sobre estas interrogantes.
Es bien sabido que las motivaciones que llevan a una persona a emprender están asociadas a antecedentes familiares, inquietudes, estilo de vida, ímpetu de ayudar a otros, desempleo o una situación económica, por mencionar algunas. Resolver dificultades monetarias o laborales son sin duda factores que avivan a las personas a iniciar un negocio que expresará, en gran medida, una situación de autoempleo. Otros emprendimientos hacen eco, ofreciendo nuevos productos, introduciendo nuevos servicios, abriéndose en nuevos mercados, con presencia en mercados extranjeros, beneficiando grupos o sectores vulnerables, influyendo e inspirando a otros.
Este último ejemplo de emprendimiento forma parte de un ecosistema que trasciende e impacta porque ofrecieron soluciones. Ofertar soluciones no solo a problemáticas o necesidades que no habían sido resueltas, también brinda alternativas para aquello que no teníamos idea que necesitábamos. Un claro ejemplo de ello son los emprendimientos tecnológicos o asociados a la tecnología como el desarrollo de apps.
Pensar en emprendimientos que se sostienen o expanden no es tema sencillo en un país como México donde las iniciativas de negocio no sobrepasan los cinco años. Los emprendimientos que trascienden, así como los que fracasan, se sostienen principalmente de su voluntad y de sus ganas y, en menor o nula proporción se recargan en un modelo de negocio, estrategias, información o capacitación. En la medida que un emprendimiento cuente con estos recursos, un producto de valor, un equipo, objetivos definidos y un plan de ejecución que conduzca a cumplirlos tendrá mayor posibilidad de trascender.
A pesar de que el contexto del país aún tiene desafíos para proveer un entorno más amigable para los emprendedores, principalmente en temas de financiamiento y administrativos, uno de los retos mayores descansa en el tema cultural. Si en el país se toma al emprendimiento como una alternativa de resignación en lugar de ser aspiración, un entorno propicio para el emprendimiento difícilmente se consolidará. El emprendimiento no sólo debe ser una aspiración, también debe inspirar. Inspirar a otros a emprender, inspirar a dar soluciones, a ayudar, a ser elemento de cambio.
Al pensar en emprendedores que inspiren, no suelen aparecer nombres de mexicanos que inculquen en otros la inquietud por emprender. Tener este tipo de figuras y difundir lo que han hecho, sus logros e impacto es la mejor promoción del emprendimiento, aunque para esto es necesario ser paciente, un emprendimiento requiere de tiempo para que pueda afianzarse y generar eco por medio de su éxito.
¿Cómo medir el éxito de un emprendimiento? Algunos indicadores pueden ser el crecimiento, la presencia en diversas regiones, la facturación, el número de empleados, ser dueño de tu propia empresa, pero el éxito también tiene otros parámetros. Hay emprendimientos que fincan su éxito en el beneficio que reciben grupos o poblaciones a través del emprendimiento, ya sea de manera directa o indirecta. El éxito puede estar fincado en la medida que resuelva problemáticas, que den alternativas, o bien, si cumple los objetivos que se planteó será un emprendimiento exitoso porque está cumpliendo con lo que se ha fijado.
METODOLOGÍA
Estudio cualitativo con 10 entrevistas a profundidad con emprendedores con empresas consolidadas y directores de organizaciones de apoyo a los emprendedores. También se realizó un sondeo entre emprendedores que forman parte de la Incubadora de negocios de UVM.