
ENTRE BRECHAS Y AVANCES: UNA VISIÓN SOBRE LA VIOLENCIA E IGUALDAD DE GÉNERO EN MÉXICO
- 53% sabe de acciones de las autoridades para prevenir la violencia contra las mujeres.
- 75% de las mujeres indica que recibió comentarios sexuales sin su consentimiento.
- 36% piensa que en el país se juzga por igual a hombres y a mujeres.
La inclusión de niñas y mujeres en la sociedad sigue siendo un pendiente; el ejercicio pleno de sus derechos, el acceso a la educación, a la justicia, su participación en la vida laboral, así como una vida libre de violencia y discriminación son fundamentales para atender la igualdad de género -un tema prioritario en la agenda global-. Para sensibilizar a la población y a los países sobre el tema existen iniciativas cuyo trabajo constante recuerda e insiste en el reconocimiento de los derechos fundamentales de las mujeres. El 8 de marzo Día Internacional de la Mujer, es un exhorto para reflexionar y actuar en consecuencia.
En el marco de esta fecha el Centro de Opinión Pública de la Universidad del Valle de México (UVM) realizó la encuesta Entre brechas y avances: una visión sobre la violencia e igualdad de género en México, con el objetivo de explorar las experiencias de violencia, micromachismos, acceso a la justicia, así como los restos que enfrentamos y los avances que notamos en la construcción de un país que ofrezca a las mujeres oportunidades igualitarias.
Violencia
La información es un elemento crucial para identificar los tipos de violencia, para percatarse si se es víctima de violencia o al victimario. 37% reconoce que le sería muy difícil / difícil reconocer si una mujer está siendo víctima de violencia psicológica; a 45% le sería difícil reconocer si una mujer está siendo víctima de violencia digital (6% no sabría reconocerlo); y 48% está en la misma situación para violencia económica (6% no sabría identificarlo).
Al consultar sobre situaciones violentas experimentadas, 75% de las mujeres indica que recibió comentarios sexuales sin su consentimiento; a 68% le dijeron que no podía o debía realizar actividades debido a su género; 57% recibió vía digital (e-mail, WA, mensaje, etc.) contenido sexual sin si consentimiento y; 57% señala que le hicieron tocamientos sin su consentimiento.
Mujeres, justicia y el poder de las redes sociales
Al hablar de violencia es obligatorio hablar de justicia y acceder a ella, no obstante 53% no considera que las mujeres tengan las mismas condiciones que los hombres para acceder a la justicia y solo 36% piensa que en el país se juzga por igual a hombres y a mujeres. Ante tal panorama, es entendible que organizar machas y protestas, crear o unirse a colectivos de víctimas de violencia, denunciar públicamente en redes sociales y buscar la cobertura de medios de comunicación sean vistos como medidas necesarias para tener acceso a la justicia.
En la búsqueda de justicia, exponer los casos a la opinión pública y en plataformas digitales constituye una medida que ha encontrado resonancia: 84% cree que las autoridades atenderán el caso si se viraliza en redes sociales, mismo porcentaje concuerda con que esa viralización hará que las autoridades trabajen más rápido y 78% piensa que con este fenómeno las víctimas de violencia obtienen justicia. Aunque en este sentido, abrir los casos públicamente podría considerarse útil, también tiene un costo. Al hacer una denuncia de violencia hacia la mujer en redes sociales o medios de comunicación, 82% ve probable que exista una condena pública sin que necesariamente la persona señalada sea culpable, para 79% es probable que las autoridades aceleren el proceso de investigación sin los debidos reparos, incluso 86% cree factible que los políticos utilicen los casos para favorecerse y 77% considera probable que con tal exposición los casos serán utilizados como base para legislar.
Micromachismos, la violencia invisible en los entornos inmediatos
La violencia al tener múltiples expresiones puede manifestarse de forma imperceptible en la vida cotidiana. A través de micromachismos, los estereotipos son reforzados y normalizados. Para ilustrar esta violencia simbólica vivida en nuestro entorno inmediato basta mencionar que un 84% reconoce que es muy común o común en que en una reunión las mujeres sirvan y retiren los platos mientras los hombres permanecen sentados; 88% afirma que los cuidados de un familiar enfermo recaen en las mujeres. Pese a que 86% admite que sigue siendo común escuchar que un “hombre tiene la obligación de ser el principal proveedor de su familia”, para 88% es frecuente ver a mujeres que sacan adelante a su familia sin la ayuda de un hombre.
Escuchar frases sexistas que asocian el ascenso laboral de una mujer con un involucramiento con el jefe o, dudar de la capacidad de una mujer en puestos de liderazgo porque son débiles también suelen ser comunes, así lo señalan 81% y 73%, respectivamente.
Y, ¿vemos avances?
Sin dejar de lado las problemáticas y los desafíos para ser una sociedad igualitaria donde las mujeres no sufran violencia, en opinión de los participantes, también se perciben avances: 90% considera que en México las mujeres hoy tienen más oportunidades para trabajar de las que tenían hace diez años; 87% ve un país donde las mujeres tienen más oportunidades para estar en puestos de liderazgo. Al hablar de las acciones de las autoridades para prevenir la violencia contra las mujeres, 53% las ha notado o sabido de ellas; 59% ha observado o sabido de acciones de las autoridades para sancionar la violencia contra las mujeres y 55% ha notado o sabido de acciones para legislar con perspectiva de género.
Al abordar sobre leyes que han sido promovidas y aprobadas a nivel federal o local, la población externa confianza al considerar que estas sancionen a quienes violen la ley; la ley Olimpia es la que inspira mayor confianza (61%), seguida la Ley Malena (53%) y Sabina con 51%.
Finalmente, 59% afirma que en su lugar de trabajo o escuela se han implementado estrategias para prevenir la violencia hacia la mujer y 55% sabe de la existencia de protocolos o documentos para prevenir y atender temas de violencia de género.
METODOLOGÍA
Metodología: Encuesta realizada del 28 de febrero al 6 de marzo de 2025 a 880 personas integrantes de un panel online. Su distribución por edad: 17% de 18 a 24 años; 25% de 25 a 34 años; 24% de 35 a 44 años; 22% de 45 a 54 años y 12% de 55 a 70 años.