PROTECCIÓN CIVIL
- A 6 meses del primer fuerte sismo ocurrido en septiembre, las autoridades locales reciben menor puntuación por su actuación durante la emergencia.
- 55% considera tener conocimientos insuficientes para enfrentar un desastre.
A 6 meses de que el país fuera azotado por el sismo del 7 de septiembre, -mismo que precedió al terremoto del 19 del mismo mes- cibernautas mexicanos fueron consultados sobre cómo calificarían a quienes trabajaron para asistir a la población afectada, otorgando calificaciones de casi 9 puntos a los rescatistas voluntarios, en contraste con la calificación de las autoridades locales que se ubicó alrededor de 4.
De acuerdo con la última encuesta del Centro de Opinión Púbica de la Universidad del Valle de México, de un máximo de 10 puntos que reflejan muy buena actuación y 1 representa muy mala, las calificaciones a detalle fueron: rescatistas voluntarios lograron 8.8; la sociedad mexicana 8.6; los de cuerpos de rescate organizados como topos y protección civil 8.4 y la comunidad internacional recibió 8.3. En tanto que las Fuerzas Armadas recibieron 7.4, el Presidente de la República 4.1 y 3.87 las autoridades locales.
La encuesta denominada Protección Civil, responsabilidad compartida, exploró aspectos relacionados con la experiencia vivida durante estos fuertes sismos, con los temores que prevalecen entre la población y con el nivel de información que las personas cuentan para enfrentar desastres.
Medidas preventivas en materia de protección civil
Al preguntar cuáles serían las medidas preventivas más importantes que tendrían que difundirse ante una situación de emergencia, impartir cursos para identificar rutas de evacuación y zonas seguras ocupa el primer lugar con 35%, seguido de realizar simulacros (24%); cursos de primeros auxilios (22%) y, preparar un equipo de brigadistas (12%).
En el caso particular de un sismo, 38% de los participantes en la encuesta considera que lo que se debe hacer es evacuar lo más pronto posible; 28% afirma que lo más importante es mantener la calma y 27% buscar un lugar seguro. Al preguntar sobre la actitud que la población ha tomado en relación a las emergencias, se puede identificar que aquellas acciones que se efectúan en el trabajo o escuela reciben mayor involucramiento de las personas, por ejemplo: 90% dice participar en simulacros de manera responsable, aunque un menor porcentaje (79%) conoce la ruta de evacuación de su lugar de trabajo o escuela y 91% dice que obedecería las instrucciones de protección civil en una emergencia. Sin embargo, las medidas asociadas al trabajo preventivo en el ámbito personal registran menores porcentajes: 64% mencionó que ha conversado con la familia acerca de las medidas a tomar en caso de emergencia, 44% no abandonaría su hogar para ir a un albergue y; sólo 43% tiene documentos personales a la mano por si se presentase una emergencia.
Al preguntar qué se entiende por protección civil, se identificó que los encuestados la asocian principalmente a tres categorías:
1.- Las acciones de protección que se ejecutan en tono preventivo; dentro de la cual la mayor parte de la población identifica acciones de apoyo o asistencia a la población en caso de catástrofe (36%), seguido de acciones de prevención (23%)
2.- Actores encargados o responsables de ejecutar las medidas, destacando en este rubro con 42% las organizaciones de la sociedad civil, seguido de entidades gubernamentales (21%) y grupo de personas organizadas (19%);
3.- Los lineamientos y protocolos, obteniendo en esta categoría 26% los referentes a salvaguardar la vida, integridad y bienes.
Catástrofes que causan mayor temor
Los sismos o temblores son las situaciones que causan mayor temor entre los participantes, obteniendo un puntaje de 5.1 (en una escala de 1 a 7, donde 1 es nada y 7 mucho); en segundo lugar, un incendio con 5 puntos; fuga de gas ocupa la tercera posición con 4.8 y; lo que menor temor causa son huracanes con 4 puntos e inundaciones con 3.9.
El temor está asociado a la exposición que la población percibe tener a cada uno de ellos. Mientras que 65% se considera poco o nada expuesto a una inundación, 75% se siente muy o algo expuesto a un temblor. 61% se siente expuesto ante un incendio y, 59% se siente muy o algo expuesto a una fuga de gas.
El nivel de exposición mantiene relación con la geografía del país, ya que las entidades de la república cercanas a la costa se sienten más expuestos a los huracanes 47% vs. 10% del resto del país. 47% de los puntos costeros sienten mayor exposición a una inundación vs. 29% del resto. En relación a un incendio la proporción se invierte, los estados costeros reportan 50% de exposición vs. 67% que registra el resto país.
Información y preparación para enfrentar catástrofes
En términos de información para saber cómo actuar ante diferentes situaciones, 55% considera tener conocimientos insuficientes para proceder ante un huracán; 53% carece de información suficiente para actuar en una inundación; 50% reporta lo mismo en caso de tener que responder ante una fuga de gas. La población encuestada considera tener mayor información para actuar en un sismo (82%) e incendio (62%).
METODOLOGÍA
Encuesta dirigida a cibernautas, se obtuvieron 588 respuestas. 55% hombre y 45% hombres con un promedio de edad de 40 años.